¡Mi corazón está desbocado!

Desperté bruscamente, porque me picaba una pierna y traté de rascarme, pero sentí que chocaba al lado con algo duro…y luego percibí un olor a género nuevo…¡que raro!

Me di cuenta del tremendo frío en todo mi cuerpo…y de un extraño silencio…

Estiré la mano para encender la luz, pero nuevamente choqué con una pared…¡Bah! ¿qué pasa? ¿por qué estoy cubierta por una pared? ¿se derrumbó la casa sobre mí ? Se me aceleró el corazón…lo sentí en mis oídos…toc – toc – toc…Empecé a mover los pies y las manos y en todos lados chocaba! Quise sentarme…¡imposible! ¡choqué la frente en el techo!

Empecé a gritar, pero me salían voces ahogadas…Me pareció escuchar voces, como en sordina.

Volví a gritar, esta vez más fuerte.

Golpeé las paredes pero sonaba como si golpeara con un martillo de goma! Mis pies no tenían zapatos, así que no podía golpear fuerte. ¿qué hago?

Volví a escuchar un murmullo…pero no pude entender palabra!  Grité.  Grité a todo pulmón! El corazón se me va a escapar!  toc – toc – toc…

Volví a gritar lo más fuerte que pude, pero me dio terror porque me faltó el aire.

Escuché un ruido muy raro y cercano, incluso sentí como una vibración…¿qué será?  Grité, pero me salió un grito ahogado…me costaba respirar…Empecé a golpear paredes y techo, me dolían mucho los nudillos, pero yo seguía en medio de una desesperación desenfrenada.

Vacié mis pulmones, lo que más pude, y luego los llené y gritéeee y gritéee…

Y entonces, sentí que me movía. Escuché hablar, y luego un ruido grande y se abrió el techo, entrando la luz de una linterna…Hubo exclamaciones, yo traté de levantar mi mano, pero choqué con un vidrio!!  Recién caí en la cuenta de que me encontraba en una urna!! La linterna apuntó a otro lado, y ví la cara de un hombre desconocido que con una herramienta, abrió la tapa ¡justo a tiempo! Porque me entró aire y yo pude llenar mis pulmones.

Me agarraron entre dos hombres y me sacaron de ahí. Yo, tiritaba y no podía hablar. Todo mi cuerpo temblaba descontroladamente. El hombre sacó un teléfono de su bolsillo, y llamó a una ambulancia primero y luego a carabineros. Yo estaba sin zapatos y con poca ropa, y el hombre me puso su chaqueta sobre mis hombros.

«¡Gracias!» le dije sólo con mis ojos, porque no podía articular palabra…Me sentaron sobre una tumba, y uno de ellos fue a esperar la ambulancia en la entrada del cementerio.

En el hospital hubo una gran conmoción, y una enfermera me decía  que fue milagroso el hecho de que ese par de guardias hubiese andado haciendo su ronda…y me hubiese escuchado…y había concenso de que nadie quería pasar por mi experiencia…Todos hablaban del tema, mientras me ponían suero y me hacían exámenes…y la camilla comenzó a desplazarse por el pasillo…sonaban las ruedas en las baldosas desniveladas…y al pasar frente a una puerta de vidrio , me vi …¡oh! ¿y qué pasó que estoy tan joven?  Y desperté…

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¿Susto? ¿miedo? ¿pánico?

Desperté demasiado temprano en medio de la oscuridad, y me quedé ahí, bien tapada, escuchando el silencio…De repente, una serie de bocinazos rompió ese silencio, y mi cama se remeció con la vibración producida por un camión subiendo la cuesta a media cuadra de distancia. Me pareció que estuvo a punto de ocurrir un choque, seguramente por culpa de alguien que no respetó el disco «Pare»…

Estaba en eso, pensando, cuando ví un leve reflejo rosado en una esquina de la cortina oscura,  que me llamó la atención y me quedé mirando fijamente la ventana a mi izquierda, para ver qué estaba sucediendo…pero a los pocos minutos ese reflejo desapareció y comenzó a granizar con una fuerza inusitada, así que me tapé y dejé apenas la nariz descubierta y me dispuse a dormir un par de horas más, cerrando los ojos.

Cuando desperté, ya no granizaba , tampoco llovía fuerte, y al abrir la cortina para ver cómo estaba el cielo, quedé boca abierta  ante tan inusitado espectáculo…¡Había nubes rosadas y grises mezcladas! Pasé mis puños por mis ojos, pues no me convencía de lo que estaba viendo…Sentía cómo mis neuronas lanzaban destellos al hacer tantas conexiones simultáneas, pues mis pensamientos volaban en todas direcciones…¿Habrá un incencio? ¿Habrá humo en la atmósfera? Pero si fuera eso, se vería rosado al atardecer y no al amanecer…¿Habrá habido una explosión en alguna parte?¿ Será una bomba? ¿Le pasará algo al sol? ¿Habrá caído un meteoríto en alguna parte?

Quise encender la tele por si decían algo, y no había ningún canal…Me empecé a asustar, se me aceleró el corazón, y sentía los latidos en las orejas…

Abrí la ventana para saber si había algún olor raro, y no lo había pero me llamó la atención el silencio…No se escuchaban los pájaros que habitualmente pasan chillando, las bandurrias que cuando aterrizan en el techo, sobre mi dormitorio, me han dado más de algún susto. Miré con atención los ciruelos en flor por si veía algún picaflor, o algún chercán, pero nada…¡ni los gatos que pasan corriendo sobre la pandereta!

Volví a la cama, me tapé muy bien porque me dió frío, y me dispuse a dormir otro rato pero mientras entraba en calor puse especial atención a identificar cualquier ruido que viniera de la calle, pero el silencio era total…z z z z z…

De repente, desperté asustada, agitada, el corazón ya se me escapaba mientras me movía en la cama, confundida porque hubiera jurado que iba corriendo, arrancando de un toro que me perseguía en medio de un campo…Ay, que tontera! Traté de recordar el sueño, pero fue imposible, pues ya se me había olvidado…

Busqué con la mano el control remoto y encendí el televisor, y ahí estaban Felipe y la Katty riéndose no sé de qué,y justo era hora de noticias, así que puse atención, a ver qué decían, porque recordé el cielo rosado… pero fueron 10 minutos de puras tonteras, alegatos políticos, asaltos, que alguien borracho chocó un auto contra una casa…y fin. Me senté en la cama y corrí la cortina, y estaba el cielo gris como siempre, y chispeando…las hojas de un laurel del vecino se movían con el viento, y justo andaba un gato en el techo de la casa vecina…¡Que raro!

¿Acaso lo soñé?

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Por culpa de las lentejas!!

Entramos a la casa de mi cuñada con mi mamá, mi hermana y mi hija, no estaba ella ni nadie de la familia…era una casa grande y extraña, que estaba en un barrio extraño, en una ciudad extraña…todo muy raro…Teníamos un viaje planeado hacia el sur en avión, así que nos levantamos muy temprano y empezamos a ordenar maletas..pero ahí empezaron mis problemas porque no encontraba lo que pensaba llevar…empecé a confundir mi equipaje con unos paquetes que llevaba sueltos y que no hallaba dónde meter, con bolsas de cachureos que habían por todos lados, encima de los sillones, sobre las camas…en la cocina….era un caos , imposible ordenar, la hora avanzaba, mi reloj se volvía loco, hasta que al fin partimos al aeropuerto encaramadas en un taxi y con mucho susto, porque había que pasar al lado de la estación del metro, todo muy oscuro, luego doblar por detrás de una cancha de fútbol, había muchas casas viejas y solitarias, y el taxi daba vueltas y vueltas, mucha basura tirada en la calle , daba mucho miedo en realidad…hasta que apareció el edificio del aeropuerto.  Nos bajamos a la carrera, cargadas con maletas, paquetes y paquetitos,  y fue re cómico porque apareció el piloto , que muy amable nos invitó  a subir al aparato. Caminamos arrastrando los bultos por la losa y subimos una escalera en medio de la oscuridad…pensé «que raro, tan oscuro»….y cuando me senté y empecé a mirar a mi alrededor, me pareció que ya había estado ahí, en otro vuelo…y eché de menos varios paquetes, uno en que llevaba lentejas…y decidí bajar a buscarlos…Parece que al final, el avión demoraría unos minutos en partir…

Me veo de nuevo en la casa,  llena de pasillos, escaleras, varios pisos, corro y recorro buscando, empiezo a desesperarme pues no encuentro lo que busco, y en esto aparece la familia de mi cuñada en patota, debo saludarlos, algo que me hace perder tiempo, porque había sobrinos y sobrinas y entremedio les explico que estoy apurada, que el avión se va…Ellos serios, poca bola, se van y yo sigo buscando. Aparece una empleada que me conoce y que me ayuda a buscar, encuentro otras cosas que había olvidado, armo un paquete en una bolsa verde y decido irme, pues no hallo  las lentejas y otras cosas, y pienso que están en el avión.

Salgo corriendo, le digo a la empleada que está conversando por ahí que apague las luces por favor, dice que sí…bajo corriendo, y al salir voy pensando que eran muchas luces, y veo salir humo de un interruptor.

Empiezo a correr y a gritar, paso frente a una bodega donde hay varios hombres, les digo que llamen a los bomberos, que habrá incendio en uno de los pabellones, mi cuñada estaba en otro, nadie me hace caso, me tramitan, quieren que explique, salgo corriendo y pensando en avisarle a otra persona que encuentre, grito y corro, pienso en lo que llevo y en los paquetes perdidos, logro llegar a la entrada del tunel del metro y lo reconozco, pero ahora hay caminos con baranda y por ahí vienen muchos autos y personas que al llegar a la entrada donde estoy , deben bajar escalones.

Yo me subo a un auto descubierto que va con varios hombres, les digo que voy apurada, pienso que el auto me llevará, pero empieza a bajar los escalones…y se demora…decido bajarme y grito, me dicen cosas, se ríen, al fin me tiro abajo, doy la vuelta, veo a lo lejos a los jugadores de fútbol y pienso que por ahí es la cosa, empiezo a elegir pasadizos, llego a una puerta, supongo que es por ahí…veo a algunos hombres jóvenes vestidos con pantalón de buzo rojo, se ríen de mí, pregunto si es por ahí la pasada y antes que digan nada me meto, subo escaleras, entro a piezas, llego a otras, y llego a una donde hay chicas piluchas, algunas con pantalón rojo también, bailan, se acarician, y eso me cae mal y trato de seguir pero eran varias piezas con ventana pero sin puerta para salir…

Recuerdo mis documentos, mi cartera, he perdido todo, además el paquete verde…¿dónde se me quedaría?  Pienso que en el auto, luego que en la casa, antes de salir…trato de volver…y encuentro la pasada para el aeropuerto, voy, caigo, corro mucho, ya no doy más, pienso que el avión ya se fue, pero aún está ahí, corro y corro, y cuando llego, echo de menos mi cartera con mis documentos…y despierto.

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Pesadilla

Sonó el despertador, abrí los ojos al tiempo que estiraba la mano para aplastar al maldito y escuchar esa copiosa lluvia golpeando los vidrios como si fuera una lluvia de finas piedrecillas. El viento empujaba y tironeaba los árboles, yo veía las sombras en las cortinas y escuchaba cómo las ramas rasguñaban las paredes, con un chirrido muy desagradable. Encendí el televisor, con la intención de ver las noticias, pero ya las habían dado…ahora era el momento de los pelambres…muy desagradable! Que día más perro!

Me tomé la pastilla para la presión y salté de la cama, busqué ropa limpia y bajé apurada la escalera porque me dió frío…encendí el calefont, abrí la llave de la ducha, y apenas me quité el pijama, entré bajo el chorro de agua caliente. ¡Por fin dejé de tiritar! Agarré el shampoo y empecé a masajearme la cabeza…y de repente, se me cayó una mano…no podía levantarla…¿qué me pasa? creí que era un calambre, como esos que me hacen ver estrellitas, en que se me enchuecan los dedos…pero no era…por más que trataba de levantar el brazo, no pasaba nada, nada…El agua seguía cayendo, con una mano me saqué el shampoo, yo seguía tratando de levantar el brazo, pero no había caso…oh!!! Tampoco puedo mover la pierna! Con mucha dificultad cerré la llave, y busqué la toalla, me la pasé por la cabeza, y cuando quise salir de la tina, la pierna no me obedecía y no la podía levantar…Ya para entonces, pensé en un accidente vascular…pensaba desesperada en las aspirinas que dejé en el velador en el segundo piso…Al pasar frente al espejo, me ví la cara chueca…tenía una oreja más arriba que la otra, y el labio caído…tiritaba de frío y de nervios, estaba aterrada, mojada, no me podía secar…estaba sola…¿a quien llamaré? no me acuerdo de ni un número…

¡Que bueno! ¡Está sonando el teléfono!  ¿Aló?

– Aló , ¿con la notaría?

– No, señora…

– ¡Ah, me equivoqué, parece…perdón… tu,tu,tu,tu…

Me pasé la mano por la cara, y la tenía mojada…el cuello mojado…Estaba transpirando, y recién me dí cuenta que estaba dormida, soñando…

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