Archive for the ‘ficción’ Category
La tienda.
Posted in ficción, tagged pesadilla, sueño on octubre 24, 2016| 4 Comments »
¡Flaco, hoy soñé contigo!
Posted in ficción, tagged sueño on enero 29, 2015| 4 Comments »
Dormía plácidamente, cuando sentí que la cama se movía…Agucé el oído, y sentí que alguien respiraba a mi lado, y al mover la mano, sentí que chocaba con alguien…¡Me asusté y encendí la luz! Y ahí estabas, flaco, sonriendo, me diste un beso en la mejilla, y estuvimos conversando mucho rato, dormimos, y cuando desperté ya no estabas! Sentí ruido en el baño, y al levantarme vi que las personas de las otras habitaciones del hostal entraban y salían del baño, pero cuando quise entrar, salió mucho vapor de las duchas…En eso, vi tus calcetines sobre la cama, y supe que no fue un sueño y que estabas tú ahí, en la ducha…En eso, apareciste muerto de la risa , pero te encontré tan flaco…Me acerqué por tu espalda y rodeé tu cintura con mis brazos, y…¿qué te pasa, flaco? ¿Qué no comes? Tú gozabas con mis preguntas.
Íbamos saliendo hacia la calle húmeda, pues lloviznaba, cuando al pasar frente a una ventana, veo a la Viana! No lo podía creer! Toqué el vidrio y la llamé, pero cuando salió, resultó que ella no me recordaba…no sabía mi nombre…a ti te miró sin verte…Nos largamos a reír, incrédulos, pero cuando nos dimos cuenta de lo que ocurría, se nos congeló la cara, nos miramos, y de la mano corrimos, corrimos, corrimos…Íbamos arrancando de la impresión…cuando de pronto sentí que caía al abismo…y al llegar abajo, pegué un brinco…¡y desperté!
¿Cápsulas mágicas?
Posted in ficción, vida real, tagged cápsulas de sesos, pesadilla on diciembre 4, 2014| 4 Comments »
De repente sonó largamente la campana de bronce…din din dinnnn…y de inmediato se escuchó ruido de puertas que se abrían, carreras por los pasillos, y una gran algarabía, risas, gritos, mientras el maestro trataba de calmarnos para que no saliéramos en estampida.
Con un gran vozarrón nos hizo callar, y nos dijo que esos campanazos eran para que fuéramos al gimnasio, porque allí se juntaría todo el colegio, ya que el Rector tenía que hablarnos.
Salimos en fila de la sala rumbo a la escalera y allí estaba aún el inspector frenando los ímpetus para que «camináramos»…
–¡Sin correr, jóvenes!
Fuimos los últimos en llegar al gimnasio, así que tuvimos que quedarnos atrás, de pie, y en silencio.
El Rector subió al escenario, y se dirigió a todo el alumnado: «Jóvenes, todos ustedes formarán dos filas. A la izquierda, los que tienen de un cinco a un siete en matemáticas de promedio. Esa fila, irá saliendo del establecimiento, rumbo a sus hogares».
«Los demás, harán una fila mirando hacia la puerta, y al ir avanzando, se tomarán la cápsula que les irá entregando el personal de salud, como ya les comunicamos a sus apoderados la semana pasada».
Hubo gran revuelo en el gimnasio, y los más grandes empujábamos a los más chicos hacia adelante, para que pasaran primero…
–¡Ya, apúrense, y tráguense la cápsula de sesos machacados!
¡Ahí mismo que se armó un tremendo revuelo! Y tuvo que intervenir el Rector, micrófono en mano…
–Ya, jóvenes, orden por favor, vayan avanzando , sin empujones…
Pero había algunos chicos que se resistían , gritando: Yo no quiero sesos! ¡me dan asco!
A esos, un inspector los agarraba del brazo y los metía a la fila, mientras el Rector añadía : Cuando obtengan sólo nota máxima en matemáticas, le darán gracias a las cápsulas mágicas…
Y los chicos y chicas avanzaban en fila hacia la puerta , donde tragaban la cápsula con un sorbo de agua. Ya nos íbamos acercando…arrastrando los pies…cuando sonó una sirena: uuuuuuuuuuuu
¡Llegué a saltar!
Y desperté….¿dónde será el incendio? Ahí comencé a aclarar mis ideas, y recordé que antes de dormir estuve leyendo noticias…como ésta:
Mi viaje a Frankfurt.
Posted in ficción, vida real on enero 7, 2014| Leave a Comment »
En un dos por tres armé el viaje! Aproveché las ofertas que recibí ayer en mi correo y compré el pasaje por internet.
Partí muy contenta, y me veo en el avión, aprovechando de aprender algunas palabras en alemán, en un curso rápido de la pantalla frente a mí…Me costó un poco pillarle la mecánica…pero tan tonta no soy, y como el viaje es largo, también estuve recordando mi inglés…Ahí, me pasa que viendo escritas las palabras, llego facilito a la solución, pero si sólo escucho soy un desastre porque hay muchas palabras que suenan igual, y encima los gringos juntan palabras, usan apóstrofe, y se me enreda todo. En cuanto al francés, yo lo aprendí hace más de medio siglo, pero aún así me di cuenta de que recuerdo bastante…y sin haberlo practicado!
También leí y dormí, pues a mi lado había un tipo poco amigable y poco atento…
Una vez en mi destino, arrendé un jeep y me largué…No sé cómo me atreví, pero iba feliz chofereando por una carretera…cuando me encuentro de sopetón con una bajada larga y casi vertical…¡oh! Sólo me di cuenta cuando la tenía encima, pues el vehículo que me precedía fue desapareciendo muy rápido…y ¡zuaz! A la velocidad que iba, no podía frenar! así que sólo usé la caja de cambios, hasta que la velocidad se hizo manejable, y además, vi que venía una zona de curvas…así que con prudencia iba de una curva a otra, como una ese…y ocurrió lo impensable! Terminé en el patio de una casa, donde había varias personas compartiendo bajo los árboles…No me lo podía creer! Ahí me explicaron que esa casa, muy bonita, no estaba en los planes de la empresa! Yo pensaba que la expropiación estaba en trámite o algo así, pero ellos me explicaban que no era así, y que nadie entendía cómo las bases de licitación tenían una carretera inconclusa…¡y yo, que creía que acá no más ocurren esos disparates!
Me sirvió el haber escuchado alemán en el cursillo del avión, porque ocurrió lo más divertido…Una de las señoras tenía en la oreja un audífono, de un traductor…¡cosas de la tecnología! así que ella me entendía muy bien, pero yo… jajajaja…entre gestos y «no, no» o «sí, sí» como respuesta a mis preguntas…Bueno, la cosa es que yo entendía muy bien…
Y en esto estaba, cuando abrí los ojos…y se me acabó todo…ya no entendía nada…estaba el canal DW con un programa de entrevistas…¡plop!
EL VIAJE.
Posted in ciencia, ficción, tagged espacio on noviembre 12, 2013| 2 Comments »
9 – 8 – 7 – 6 – 5 – 4 – 3 – 2 – 1 -¡cero!
Ese estremecimiento fue impresionante; todo vibraba y lentamente comenzó el ascenso, dejando atrás nuestra casa…nuestro hogar…Esos minutos se hacían largos…y nos remecíamos…Esto, aparte de sentirme clavada al asiento, y como si esto fuera poco, sentir que la cabeza me crujía…¡oh! Esta sensación de velocidad que se incrementa, eso de sentir que debía estar con los ojos cerrados…porque si los abría, seguro que se me caerían los párpados! ¿Quéeeee? ¿Y por qué sentí eso? Porque la Tierra me tira…me tira con fuerza… Y seguía vibrando…cuando vi por la claraboya que iba desapareciendo el cielo azul, y en cambio se veía todo negro…¡que raro!
Un remezón fuerte y seco, nos indicó que ya se desprendieron los tanques de combustible.
Raro fue mirar el cielo negro, y luego de un giro, ver mi planeta azul como realmente es!! ¡¡AZUL!! ¡Precioso! ¡Pequeño! Solitario, desvalido, y en eso estaba, con un nudo en el estómago…cuando dejamos de subir, y llegamos a nuestra órbita.
No quería dejar de mirar hacia el exterior, pero las voces por la radio me trajeron a la realidad y con un suspiro, miré los instrumentos y comencé a contestar las preguntas desde Tierra, y a tomar decisiones.
De repente escuchaba cifras, nombres, cifras de nuevo…pero ¿en qué idioma?¿qué dice esa voz por la radio? No podía contestar…¿qué hago?
Miré a mi derecha con expresión de pregunta, esperando que mi compañero de viaje me sacara del apuro, y… ¡no había nadie! El corazón me dio un vuelco, y miré a mi alrededor, pero ¡estoy solaaaaaa! La voz no me salió… sencillamente, quedé muda!
Abrí los ojos, y me di cuenta de que estaba el televisor encendido…y en un canal alemán…
¡Con razón no entendía nada! ¡ja ja ja!
¡Que despertar más entretenido!
¡Mi corazón está desbocado!
Posted in ficción, pesadillas, tagged pánico on octubre 21, 2013| 6 Comments »
Desperté bruscamente, porque me picaba una pierna y traté de rascarme, pero sentí que chocaba al lado con algo duro…y luego percibí un olor a género nuevo…¡que raro!
Me di cuenta del tremendo frío en todo mi cuerpo…y de un extraño silencio…
Estiré la mano para encender la luz, pero nuevamente choqué con una pared…¡Bah! ¿qué pasa? ¿por qué estoy cubierta por una pared? ¿se derrumbó la casa sobre mí ? Se me aceleró el corazón…lo sentí en mis oídos…toc – toc – toc…Empecé a mover los pies y las manos y en todos lados chocaba! Quise sentarme…¡imposible! ¡choqué la frente en el techo!
Empecé a gritar, pero me salían voces ahogadas…Me pareció escuchar voces, como en sordina.
Volví a gritar, esta vez más fuerte.
Golpeé las paredes pero sonaba como si golpeara con un martillo de goma! Mis pies no tenían zapatos, así que no podía golpear fuerte. ¿qué hago?
Volví a escuchar un murmullo…pero no pude entender palabra! Grité. Grité a todo pulmón! El corazón se me va a escapar! toc – toc – toc…
Volví a gritar lo más fuerte que pude, pero me dio terror porque me faltó el aire.
Escuché un ruido muy raro y cercano, incluso sentí como una vibración…¿qué será? Grité, pero me salió un grito ahogado…me costaba respirar…Empecé a golpear paredes y techo, me dolían mucho los nudillos, pero yo seguía en medio de una desesperación desenfrenada.
Vacié mis pulmones, lo que más pude, y luego los llené y gritéeee y gritéee…
Y entonces, sentí que me movía. Escuché hablar, y luego un ruido grande y se abrió el techo, entrando la luz de una linterna…Hubo exclamaciones, yo traté de levantar mi mano, pero choqué con un vidrio!! Recién caí en la cuenta de que me encontraba en una urna!! La linterna apuntó a otro lado, y ví la cara de un hombre desconocido que con una herramienta, abrió la tapa ¡justo a tiempo! Porque me entró aire y yo pude llenar mis pulmones.
Me agarraron entre dos hombres y me sacaron de ahí. Yo, tiritaba y no podía hablar. Todo mi cuerpo temblaba descontroladamente. El hombre sacó un teléfono de su bolsillo, y llamó a una ambulancia primero y luego a carabineros. Yo estaba sin zapatos y con poca ropa, y el hombre me puso su chaqueta sobre mis hombros.
«¡Gracias!» le dije sólo con mis ojos, porque no podía articular palabra…Me sentaron sobre una tumba, y uno de ellos fue a esperar la ambulancia en la entrada del cementerio.
En el hospital hubo una gran conmoción, y una enfermera me decía que fue milagroso el hecho de que ese par de guardias hubiese andado haciendo su ronda…y me hubiese escuchado…y había concenso de que nadie quería pasar por mi experiencia…Todos hablaban del tema, mientras me ponían suero y me hacían exámenes…y la camilla comenzó a desplazarse por el pasillo…sonaban las ruedas en las baldosas desniveladas…y al pasar frente a una puerta de vidrio , me vi …¡oh! ¿y qué pasó que estoy tan joven? Y desperté…
«El paseo».
Posted in ficción, tagged temporal paseo on octubre 13, 2013| Leave a Comment »
Brillos en el pelo.
Posted in ficción, tagged circo, trabajo on agosto 15, 2011| Leave a Comment »
Cindy sacó del cajón la malla multicolor y con toda calma se la puso para luego pararse frente al espejo y mirarse desde todos los ángulos, observando cada curva de su joven cuerpo. Buscó el peine, deshizo el nudo de la cinta que sujetaba su pelo rizado y cepilló cada mechón con parsimonia y elegancia. Luego comenzó a hacerse un complicado moño el que fue adornando con pedrería brillante y fijando con horquillas cada rollo de pelo de manera que quedara firme y gracioso. Ya era una experta , y le gustaba dedicar el tiempo preciso para que hubiera cero posibilidad de accidente en el escenario, al hacer sus clásicas volteretas. Una vez que el moño quedó perfecto, se dio a la tarea de pintar sombras sobre sus bellos ojos, delinear sus cejas, sus labios, poner rubor a sus mejillas, y pegar esas largas pestañas para que la luz de los focos no hiciera que se le vean raros los ojos.
Mientras ella se daba todo el tiempo del mundo en estos menesteres, se escuchaba a lo lejos la música y aplausos del circo, y ella sabía que ya faltaba poco para que la anunciara el maestro de ceremonia…Estaba concentrada en amarrarse las zapatillas especiales, cuando la hizo sobresaltar el toc toc toc en la puerta de la casa rodante y dijo “ya, voy”…
Agarró la elegante capa, se la puso sobre los hombros, salió presurosa al frío de la noche y con paso rápido se dirigió hacia la carpa donde se oía el estruendoso aplauso que premiaba la actuación de los payasos Copito y Pinpín que recién terminaban su rutina.
Salió el Señor Corales a la pista y con mucha ceremonia anunció a la gran malabarista en la cuerda floja a 4 metros de altura…¡Cindy!
Ella entró a la carpa y se dirigió hacia el centro de la pista donde hizo una reverencia, y advirtió que había mucho público esa noche de sábado. Comenzó la música, que le puso emoción a su número.
Luego fue hacia la derecha, se sacó la capa , se la entregó al auxiliar que siempre la ayudaba y le pasaba los aparatos para hacer sus malabares, y comenzó a subir la escalera con elegancia. Ella sabía muy bien que debía darse su tiempo para cada paso, cada movimiento, nada de apresuramientos, había que hacer todo con elegancia, y así darle categoría a su actuación…Al llegar arriba, pisó y movió los pies en la cajita con carbonato de magnesio para darles adherencia , y pisó el cable asegurando cada paso con sus dedos. Al llegar a medio camino, hizo un par de volteretas hacia delante , otro par hacia atrás, y esperó los aplausos con una tímida sonrisa en sus labios.
En ese momento su auxiliar comenzó a lanzarle uno a uno los platos y ella graciosamente los agarraba y lanzaba hacia el cielo hasta tenerlos todos en movimiento, cosa harto difícil pues no es lo mismo estar en el suelo con los pies en paralelo, a estar en la cuerda y un pie delante del otro…y poco a poco fue dejando caer de a uno los platos mientras seguía jugando con 5…con 4…con 3… con 2… y uno…Aplausos.
De inmediato el auxiliar le lanzó una cuchara y ella puso el mango en su boca, un huevo, que puso sobre la cuchara… y 2 hula hula, que puso uno en cada brazo y comenzó a girar y a girar, y al mismo tiempo daba pasos hacia el otro lado de la cuerda…Al llegar, dejó caer los aros uno a uno, y vino el aplauso al ver que el huevo no cayó de la cuchara, y el auxiliar para demostrar que era de verdad, al recibirlo de vuelta quebró al golpearlo con la misma cuchara…
Nuevamente varias volteretas muy graciosas en el aire, y bajó por las escaleras en medio de los aplausos. Una vez que llegó al medio de la pista hizo varios ejercicios y contorciones con mucha calma y seguridad, y siempre con una hermosa sonrisa que cautivó al público. Puso la capa sobre sus hombros, y se retiró en medio de una ovación.
Llegó a su casa rodante, y comenzó a deshacer todo lo hecho media hora atrás…Se quitó el maquillaje con una crema, se deshizo el peinado, guardó los adornos en sus cajitas, muy ordenados, se cepilló el pelo luego de quitar todas las horquillas, se quitó las zapatillas y las guardó en una bolsa, se quitó las malla multicolor y guardó todo en el cajón del mueble bajo la cama, se puso un bluyín y una polera , sus zapatillas azules que tanto le gustaban, y se sirvió una taza de té caliente para entibiar su cuerpo antes de ir a ayudar a ordenar la carpa, cuando terminara la función de esa noche. Había que recoger la basura que el público tiraba al piso y dejar todo listo para la función de mañana.
Este era un trabajo para el que no había aplausos, luces, música, ni brillos en el pelo.